lunes, 7 de diciembre de 2015

Pasaje del Correo (y alrededores)


Estoy feliz del paseo que les traigo hoy, y que hice hace dos días con mi Mamá, que por cuestiones de salud hace casi dos meses que está instalada en Buenos Aires y nos debíamos una tarde así!

Nuestro recorrido comienza en la esquina de Vicente Lopez y Rodriguez Peña con El Mercado (construido en 1900 y que mantiene su fachada original, aunque albergue los negocios más modernos), y continúa por Vicente López donde descubrimos El Pasaje del Correo (altura 1661) remodelado y lleno de vida con restaurantes y confiterías, escuelas de danza y teatro, salones infantiles y la magia de creer por un ratito que no se está en Buenos Aires sino en algún rinconcito europeo...











La bellísima y enorme Plaza Vicente López y Planes (delimitada por Paraná, Montevideo, Arenales, Juncal y Vicente Lopez) bañada de amarillo con las flores que caen de sus árboles Paraíso, te invita a quedarte encontrando un poco de paz. La bordean jacarandaes y faroles dorados. En su centro, un gran ombú.





Esta esquina, que tiene el cruce de 3 calles (Paraná, Juncal y Montevideo) tiene también uno de los puestos de flores más lindo y variado que hayamos visto:




 Justo frente a la plaza, sobre Paraná, una sucursal de la pizzería Los Inmortales; al lado la heladería Fragola (que también ofrece café y crepes). A mitad de cuadra una sucursal de otro clásico de las pizzas: Los Maestros y un local de Frappé (tienda de vinos). 
Cruzamos Juncal y nos encontramos con Nucha, que además de sus reconocidas tortas, ofrece opciones saladas para almorzar.





 Finalmente entramos en el clásico Café Martinez y nos resfrescamos con un batido de frutos rojos y un café frío Marroc.





Otros imperdibles de la zona por Rodriguez Peña: 
La fuente en el cruce con Juncal

 Y el parque que lleva su nombre (entre Marcelo T. de Alvear y Paraguay) totalmente renovado:


Link relacionado: Recoleteando

1 comentario:

  1. Al día siguiente volví, era inevitable! Quería mostrar el nido en el farol y abrazar uno de los árboles de la plaza. Demás está decir que aproveché y almorcé en uno de los restaurants del Pasaje del Correo, "Squzi!" donde nos atendieron muy bien y la comida es exquisita. Gracias.

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